martes, 12 de abril de 2011

de visita

Esta semana pasada me tocó tener un par de malas noticias relacionadas con la salud, pero no la mía. El jueves pasado internaron a un amigo mío porque hace un mes que no se puede mover del dolor corporal que tiene. Aparentemente puede ser una enfermedad rumatológica, de esas que te duelen las articulaciones de por vida... y solo tiene 29 años. Me afectó mucho más de lo que hubiera esperado, dado que ya sabía que estaba enfermo pero no esperaba que fuera para tanto y, en especial cuando lo fui a ver al hospital y lo encontré así como encogido, hablando bajito, moviéndose como un anciano cuando él es un pibe bullicioso como yo, inquieto, gritón, que reparte abrazos de oso... la verdad es que me hizo muy mal. Y al otro día de que lo ví me avisan que mi tío está internado, jodido del páncreas... y tiene 70 años.
Así que hoy tengo muchas ganas de llorar, pero bua, nada nuevo no? jajaja. No estoy en condiciones de ser de ayuda para nadie y sin embargo no me puedo alejar, necesito acompañar a mi amiga en este momento que tiene que ser tan fuerte, a tan poco de estar viviendo en pareja, tiene que poner garra por él y es una situación a la que no está acostumbrada... pero yo no tengo fuerzas para prestarle. Hoy me traje el bolsito para ir a pasar la noche con ella en su casa otra vez y hacerle el aguante, pero no se si seré más un estorbo que una compañía. Ella me dijo que si me voy a poner mal que no vaya a ver a Gustavo al hospital hoy y tiene razón, la idea no es bajonearlo al pobre pibe, pero por otro lado no quiero ir para ponerme a llorar, quiero verlo y demostrarle mi cariño y llevarle buena onda, necesito verlo y que sepa que lo quiero... lo cual, en realidad, está mal porque no se trata de lo que yo necesito sino de lo que él necesita. Así que no se, capaz que voy y me quedo poquito para evitar el llanto y después, si mi amiga quiere que la acompañe, iré y si no le sirvo espero que me lo pueda decir directo y me voy a mi casa, ya le dije que no quiero estorbar y que sea sincera conmigo.

Por una vez los problemas que me aquejan no son los míos propios (para que vean que no soy tan egocéntrica, jeje :P), pero si no me afectaran directamente tampoco llegarían a este blog, no?

miércoles, 6 de abril de 2011

sigo y no sigo

Sigo enferma, después de 10 días y tomando antibióticos... hoy pegué una recaída y no me puedo mover. Estoy en el laburo, no me quise ir a casa porque tengo cosas que hacer, se viene la feria del libro y estamos a las corridas. Además, esta noche tengo facultad y si me iba a casa temprano ni a palos iba a cursar después. Y mañana seguro me voy a querer quedar en casa, pero tengo dentista y dermatóloga a la tarde y es un dolor de ovarios andar cambiando los turnos todo el tiempo... así que vendré a laburar.
Lo que no se si sigo es la cursada de la facu... si, ya se que recién dije que hoy tenía que ir y por eso no me fui a mi casa temprano a pesar de sentirme como el upite, pero es que ya perdí las clases la semana pasada, ayer solo me quedé a media clase (estaba sentada en el suelo y ni ganas...) y hoy que me siento mal... A ver, la pura verdad es que no tengo ganas de ir a la facultad. No tengo ganas de estudiar (nunca tuve) y menos una materia que solo me resulta soportable cuando la cantan Les Luthiers (ver Dilema del amor...).
Seguiré yendo a terapia... después de más o menos un mes sin ir por diferentes razones, a partir de la semana que viene vuelvo en un nuevo horario y lugar para poder cursar en la facu :S:S:S Todavía no se como le voy a decir a mi doc que no quiero cursar después de que se tomó la molestia de encontrarme otro horario, pero es que no tengo ganas de nada, a veces ni de ir a terapia y ese, básicamente, es el quid de la cuestión.
Al menos todavía me levanto y vengo a trabajar.