viernes, 26 de febrero de 2010

Croacia

En facebook hay un juego de palabras que se hace solo entre mujeres y que se refiere a nuestro "estado civil" por llamarlo de alguna manera... o quizás mejor quedaría "estado sentimental". En fin, el punto es que tenemos una lista de palabras clave para cada opción y, en este caso, usamos países... Es bastante tonto, lo se, pero me causó gracia al principio y ahora no puedo despegarme de su uso. Por ejemplo, Croacia significa "recuerdos de amores pasados"... :S si, se lo que están pensando, y lamentablemente están en lo cierto.
Puedo echarle la culpa a que esta fue una semana complicada en lo que a "hormonas" se refiere, pero la verdad es que no tengo excusa: NO debería seguir pensando en él Y PUNTO. Y lo más cómico del asunto es que no quiero volver con él ni un poquitito, ni a palos, ni en pedo, ni por joda, NO. No se trata de que lo extrañe a él, sino de que me da bronca que no me pudiera querer como yo lo quise, me da bronca que haya sido tan estúpido de dejar pasar la oportunidad de tener una relación buena y sana y copadísima (no me la estoy dando de grandiosa, sino que creo realmente que podría haber sido así entre él y yo) y me da más bronca pensar que no soy capaz de encontrar algo mejor que él, porque a estas alturas ya se que tengo un gusto por los complicados y la culpa en todo esto también es mía.
Así que, así estuve estos días, buscando su nombre en el facebook (ya no estamos como amigos, pero hubo un tiempo en que su perfil era público y lo vi una vez... ahora lo cerró... mejor), golpeándome la cabeza contra la pared al entrar a la página de la que fue "la otra" y encontrarme con una mina 2 veces mi tamaño (y yo no soy chiquitita) por lo que solo pude concluir que le gustan las mujeres redondas, y encima su cumpleaños es unos días después del mío, así que también le gustan las escorpianas, las que tenemos más "fuego" en nuestro interior.... blablabla, pavadas.
Lo que realmente me jode es que las pocas fotos que vi de él, se lo ve como siempre, como si nada, como si el haberse quedado sin el pan y sin la torta no lo afectara, pero además se peleó con mucha gente este año, y yo me pregunto: ¿no se da cuenta de que se está quedando solo? ¿no le importa? ¿no puede pensar por una vez que es él quien se equivoca?
Lo peor, lo verdaderamente peor, es que vi muchas fotos nuevas en las que está con cierta "amiga" (flaquita, bonita... todo lo contrario a mi) que se conocen de años, al parecer, pero ahora es todo comentarios tipo "te quiero, sabelo", "te quiero muuuuuuuucho", "sabés que te quiero, no?". ¿Acaso no dijo él que le costaba decir esas palabras incluso a sus amigos? ¿Acaso fui yo la que le enseñó a hacerlo al decirle que era necesario expresar los sentimientos para que los demás se dieran por enterados? ¿Y ahora los expresa... con ella? :( No se dan una idea lo triste que me puso ver eso.

Ya está, la semana se va a terminar, mis hormonas volverán a su sitio y él seguirá fuera de mi vida. Este es un año de novedades, quiero terminar la facu, me quiero ir de viaje, quiero salir más... y si bien parte de mi quiere conocer a alguien aunque sea para sacarme a este estúpido de la cabeza, otra parte sabe que se tiene que enfocar en lo que es importante: estudio, trabajo, planes de viaje, luego planes de mudanza. Y que el mundo entero y sus idiotas se caigan a pedazos a mi alrededor, total no me voy a inmutar.

viernes, 12 de febrero de 2010

el cantar de los grillos...

cri... cri-cri... cri-cri-cri........

¿¿Cómo puede ser?? esto ya está yendo demaisado lejos! No es solo mi falta de "líbido creativo", ya ni siquiera puedo escribir sobre mi!! con lo que me gusta derramar mi autoestima deshinflada por el mundo bloggero!... qué me pasa???

Nada.
Esa es la respuesta. No me pasa nada, por eso es que no tengo ganas de escribir. Los días suelen ser lentos, pero las semanas se me pasan volando y cada vez que me quiero acordar ya es viernes y solo pienso en descanzar todo el fin de semana (que, al no ir a trabajar, a veces se me hace largo), y sin percatarme de cómo, sigue pasando mi vida en una monotonía sin problemas, pero también sin emociones... es más, lo único que me emociona ultimamente es ver la serie Bones, que me bajé entera y ya llegue a la temporada actual, aunque aún me faltan un par de capítulos para ponerme al día, pero está cada vez más emocionante...
Bueno, es oficial, soy una pateta importante si lo único que me da emoción en la vida es una serie... hace años que no me pasaba una cosa así, Dios mío... Casi que me hace desear estar mal para poder quejarme de algo, jajajaja. CASI, pero no. La verdad es que prefiero mil veces esta monotonía a estar mal, pero tampoco es que la quiera tanto como para que sea una parte continua de mi vida.

uuuuffffff, tengo que hacer algo... capaz que es el momento justo para estudiar y rendir finales, no?

jueves, 4 de febrero de 2010

el regreso de los muertos vivos

Hola gente!! no se que me pasa, pero empecé el 2010 con cero ganas de escribir, así que es por eso que ando desaparecida. Entré hoy al blog porque estoy aburrida y para ver que es lo que me estaba perdiendo últimamente de los blogs vecinos, pero como estoy en el trabajo tampoco es que me puedo poner a comentarles. Prometo que lo haré en otra ocasión.

Por lo pronto, lo prometido es deuda, así que aquí les publico una historia que empecé a fin de año y que, como todas mis historias, se murió antes de empezar. Es decir, cuando llegué al final de la página A4 del word ya no pude seguir escribiendo... ni siquiera soy capaz de finalizar los diálogos!
En fin, acepto sugerencias, críticas e ideas para intentar continuarlo y ver si así consigo despertar a mi parte escritora de este letargo retardado que tiene.

Nos vemos!!

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No tenía una vista privilegiada desde su balcón, solo podía ver las terrazas de las otras casas de la manzana y las paredes de los edificios que daban a la otra calle, pero al menos a esa hora de la tarde entraba el sol poniente y el atardecer era su parte favorita del día. No siempre llegaba a verlo, ya que al volver del trabajo en invierno ya era de noche y en verano, cuando el sol moría más tarde, hacía demasiado calor para sentarse ahí afuera. Por eso los fines de semana disfrutaba de ese rato a solas entre ella y el atardecer, como lo hacía en ese momento, y lo utilizaba para despejarse de cualquier problema que la acuciara.
Excepto ese día.
Era un domingo precioso de principios de junio, un día sin mucho frío y con el cielo despejado. No era un atardecer normal de invierno, sino uno que realmente valía la pena disfrutar, pero ella no lograba desconectarse. En lugar de dejar que el cielo rosado la calmara y la llenara de paz, no hacía más que darle vueltas y más vueltas a lo que había sucedido la noche anterior.
Acababa de terminar una relación muy larga y muy compleja y lo que más le apetecía era relajarse y disfrutar de sus atardeceres para poner su vida en orden nuevamente, pero lo de la noche anterior la había dejado aún más turbada que antes.
Isabel había ido a la fiesta con intención de relajarse y olvidar las penas que su relación había dejado como secuela. La había invitado su amiga Claudia, a quien no veía muy seguido y a quien debía más de una charla íntima, por lo que no dudó un segundo en aceptar la salida. Supuso que así podría pasar un buen rato con su amiga y al final de la noche compartirían un pote de helado de dulce de leche con chispas de chocolate, como solían hacer en otros tiempos, hablando de tonterías y de cosas serias a la vez. Pero no fue así como terminó la noche.
Claudia estaba en pleno romance nuevo –uno de los tantos que solía empezar y terminar en menos de un mes- y esa noche había ido con su nueva conquista a la fiesta, lo cual Isabel no supo hasta que la pasó a buscar por su casa.
-Él es Jorge –dijo Claudia y la miró como diciendo “mi nuevo hombre”-. Jorge, ella es mi amiga Isabel.
-Mucho gusto –dijo Jorge e Isabel, que estaba algo sorprendida y algo decepcionada por el repentino cambio de planes, solo atinó a responder con un tímido “hola”.
-Isa trabaja en una multinacional, en la parte de recursos humanos –comentó Claudia a Jorge mientras terminaba de acomodar su bolso-, aunque en realidad es escritora.
-No –se excusó Isa-, en realidad estudié letras y siempre me gustó escribir, pero ser escritor es otra cosa.
-Bueno, pero ¿nunca publicaste nada? –preguntó Jorge, y a ella le pareció realmente interesado.
-Solo un par de poemas y un cuento en compilaciones editoriales, pero de eso hace mucho tiempo.
-¿Y cómo terminaste trabajando en recursos humanos?
-Como la mayoría de la gente: necesitaba un trabajo, empecé de asistente sin experiencia hace unos años y al final me terminé quedando. La verdad es que me pagan bien y como son las cosas en este país, uno no puede dejar un buen trabajo por irse a perseguir un sueño... a menos que vengas de familia con plata y que te banque, claro. –Jorge asintió con la cabeza y no dijo nada más, así que ella preguntó. -¿Y vos a qué te dedicás?
-Yo trabajo en una editorial, en la parte de producción. Estudié diseño gráfico pero nunca terminé de dar las materias. Como vos decís, el trabajo viene primero, y cuando entré ahí encontré una veta del diseño que me gusta, así que me terminé quedando.